DEMÉTER Y POSEIDÓN

Poseidón persiguió una vez a Deméter, en su forma original de diosa-yegua. Ella se resistió a Poseidón, pero no pudo ocultar su origen divino entre los caballos del rey Oncos. Poseidón se transformó en semental y la cubrió. Deméter se puso literalmente furiosa por este asalto, pero lavó su ira en el río Ladón. Le dio a Poseidón una hija Despena, pero que cuyo nombre no podía ser pronunciado fuera de los misterios eleusinos, y un corcel de negras crines llamado Arión. En Arcadia se había adorado históricamente a Deméter como una deidad con cabeza de caballo.